Comunicación con Tótem Mariposa
Largos años atrás, me inculqué la moral idea de que siempre había de ayudar al otro. Sentirme útil es una parte de la personalidad que se nutre del ego salvador y un vicio un tanto adictivo que es difícil de percatarse y rectificar a tiempo. Por eso, con mis años de experiencia, estoy aprendiendo a interferir lo mínimo posible en el proceso de vida de las personas de mi alrededor, animales, plantas y otras entidades. El verdadero respeto y la verdadera forma de actuar con respuesta a la ayuda desinteresada, es permitir que cada uno labre su camino, supere sus propias trampas y se cure sus propias heridas. –“Sin dolor, no hay aprendizaje”. Eso nos ayuda a todas las personas que somos “salvadoras” a ver qué tanto de nosotras mismas proyectamos en los demás y cuánto necesitamos interpretar el papel de veladores en las acciones de los más “perdidos”. Por eso en este escrito quiero compartir con vosotros el mensaje del Tótem de la Mariposa; que tuve el privilegio de conectar en una escapada natural.
CANALIZACIÓN
-“Sabemos el camino que tenemos que recorrer”
Viene a mi la voz de la mariposa, es parda y con círculos en formas de ojo de búho.
-Nos guiamos por la polaridad de la tierra. Ante tu gran cuestión antigua, nuestras transformaciones son como un río con gran torrente de agua transformadora que inunda todo nuestro patrón y lo esperamos abiertamente hasta que llega el momento. Puede que los ciclos varíen un poco en cada una, pero en realidad, todo sigue un compás armonioso como si de una melodía orquestada se tratara.
-¡Vaya! ¡menuda experiencia esta que me transmites! No he tenido tiempo de preguntarte que ya sabes gran parte de mis cuestiones…
-La pregunta ya estuvo ahí antes de que fueras consciente de ella, muchas cosas nacen en ti de forma sutil y es más lento el proceso de consciencia lineal que trabaja tu sistema comunicativo. Estamos aquí tantas veces, oyéndote y respondiéndote sin que “lo sepas”… Y no solo tú, si no todos vosotros.
-¡Es increíble, gracias por trasladarme tanta transparencia! En esta ocasión quisiera resaltar el proceso de crecimiento y transformación que sostenemos todos los seres vivos y qué gran ejemplo que vosotras para enseñarme. Todas las veces que os he observado resonaba en mí una gran vulnerabilidad y fortaleza al mismo tiempo. Esto me colapsaba mentalmente de alguna forma.
-No es la primera vez que aprendes que en la mayor vulnerabilidad reside la mayor fortaleza hecha brillo. La delicadeza y fragilidad es totalmente necesaria para sostener una estructura mas fuerte, novedosa, resistente y férrea. Si nosotras no nos preparásemos para ese día, no estaríamos aceptando nuestra fragilidad ante la transformación que sucede en nuestro capullo. Sin nuestra parte blanda, no maduraría nuestro nuevo cuerpo esquelético, ni se crearían los tejidos para nuestras nuevas alas. Hay un proceso que los humanos aún no habéis aceptado del todo; la entrega al “dolor” para crecer y evolucionar a una nueva existencia y plano de vida.
-Pero ¿eso requiere de cierto masoquismo? El dolor se evita precisamente…
-No confundas jamás dolor con sufrimiento. El dolor es innato, natural y hasta válido para nuestro sistema de supervivencia. El sufrimiento es un juego adictivo al que vosotros queréis jugar.
-Vaya, este momento consciente se escapa a todo debate que mi ego quiera sostenerte. Tratando sobre el proceso individual de cada ser vivo, ¿Cuándo se supone que “debemos ayudar” al otro? y ¿Cuándo estamos interfiriendo?
–Interfieres en el momento en que consideras que ese ser no es capaz de hacerlo solo. Y realmente es una falta tan grave de respeto, que dejáis de creer en ese individuo quitándole valor y dejando de apostar por su propio proceso individual de sanación. Ayuda solo en cuanto se vea amenazada o en peligro su existencia como Ser, ni tan solo en vida, ni tan solo en muerte. Cuando sea estrictamente clara su llamada urgente y pida ayuda desde su voluntad más profunda y sincera. Facilitar las cosas al otro, no le ayuda, si no que entorpeces su camino y aprendizaje individual y de crecimiento. No eres “quién” para quitarle ese regalo que es auténticamente suyo. Yo no quisiera transformarme en mariposa por que tú lo hagas realidad. Yo deseo permitirme ser blanda, esponjosa, divertida y tierna y deseo encontrar en mí misma el camino a mi transformación e iluminación. Porque cuando vuele y vea otras realidades, saboree el polen y me toque el sol desde el aire, será tan excitante y maravilloso que la vivencia y el aprendizaje serán plenos en mí. Yo sé que a ninguna de las mariposas que has visto transformarse, las has ayudado porque sabías que en ese intento podrías matarlas e interferir en su proceso; Entonces, ¿porqué no haces lo mismo con los de tu especie?
-Creo que me lo has dejado muy claro… Es tan llanamente simple, que me cuesta darle más vueltas.
-Dale la oportunidad a los demás a ser ellos mismos en su camino de vida y evitarás cargarte innecesariamente de responsabilidades que no son tuyas y no te pertenecen. En el mundo cada uno ha de dejar su espacio con sus vibraciones experienciales, por que cada “gota” de agua que conformamos hacen que el propio mar se entienda mejor a sí mismo. Debes aprender a estar abierta y a ser valiente para vivir tu propio camino de transformación y dejar de mirar “en ojo ajeno” el viaje evolutivo de los que están a tu alrededor. Porque nosotras, nos amamos y nos confiamos la posibilidad de ser capaces de viajar nuestro sino aunque exista también nuestra consciencia colectiva que nos ilumina como el sol en el viaje…
-De acuerdo. Una vez más sin palabras… Gracias por este espacio que me has dedicado. ¡Gracias! y entiendo que todo reside en mi propio miedo de mirar hacia dentro de mi propio capullo, mi propia crisálida, de seguir los pasos que marca mi propio ciclo, y que de alguna forma no me respeto a mí misma cuando ayudo y deshecho toda mi energía en otras personas nada tienen que ver con mi camino. De alguna forma es como si pospusiera inconscientemente mi transformación hacia la iluminación todos los días que se me da la oportunidad de adentrarme en mi ciclo…
-Las fases de todos nosotros son nuestra responsabilidad de aprendizaje. Si no requieres del lapso para liberar, jamás llegará a ti la nueva etapa de prosperar, crecer y sembrar. Llevas tiempo preparándote y cuando rompas la crisálida, llorarás de éxtasis y felicidad…
-Me llena de gozo solo el imaginarlo. Gracias por tus respuestas, Gracias por tu paciencia y sensibilidad para trasladarme esta información. Siento como si tu energía fuera angelical…
-Te acompañamos siempre, abre los ojos cada vez que revoloteemos cerca de ti. La suavidad tuya nos atrae a tu campo, si nos ves bellas imagínate cuánto lo eres tu también. 😉